«LA CREATIVIDAD» I (Josep María Alarcón)
- El diccionario de Psicología define la creatividad como un término que designa una serie de rasgos de personalidad intelectual de la persona.
Para Guilford, la creatividad implica huir de lo obvio y lo previsible para producir un resultado inédito y novedoso. El proceso creativo en su fase embrionaria, se genera con una actuación mental, actúa de forma directa, la capacidad de examinar y confrontar toda la información relevante sobre la obra a realizar. El pensamiento puede generar múltiples intentos de enfocar la creación y ejecutarla, descartando la visualización que podrían ser más obvia y por consiguiente menos original. El artista elige el procedimiento más afín a su dialéctica plástica, no se puede concebir una obra de calidad, sin la liturgia previa a la acción, lo contrario sería fruto del azar y por tanto, de contenido sustancial de baja trascendencia. La práctica en el nivel «emergente», la fuerza creativa irrumpe con tal contundencia, que ya no se trata de modificar, sino de ofrecer nuevos lenguajes, nuevas propuestas. Los artistas aportan ideas radicalmente nuevas. En general se presenta con un lenguaje abstracto. Es el nivel que caracteriza al talento y al ingenio.
La configuración de la idea en el pensamiento, es un paso previo fundamental. Según su propia definición, el pensamiento es aquello que se trae a la realidad por medio de la actividad intelectual. De este modo, podemos decir que la obra toma forma a través de procesos racionales del intelecto. El pensamiento puede abarcar un conjunto de operaciones de la razón, como lo son el análisis, la síntesis, la comparación, la generalización y la abstracción. Podemos afirmar, que el pensamiento creativo es la base del Arte, ya que se basa en la libertad de modificar una idea en función de las motivaciones creativas del artista.